El grupo se reduce a cuatro (dejamos atrás a los tíos, nos acompañan Oscar y Ana). La esperada tranquilidad se hace rogar pero nosotros, humildes descubridores, logramos alcanzarla escondida entre piedras, junto a una guitarra y la sola presencia de nuestros cuerpos.
Cae la noche y la plaza nos atrapa con una feria bien plantada, helados y un cerro a lo lejos que nos recuerda al Bolsón.
top model remojando sus pies!
los largavistas de Pancho Dotto detectan un nuevo talento
Paso de las tropas: arriesgada venta ambulante
Que buenas fotos amiga! y que bueno recibir noticias.
ResponderEliminarCon Flor seguimos en Mar del Plata, paseando mucho también y disfrutando de las vacaciones y del mar.
Espero que sigan recorriendo esos lindos caminos y que disfruten mucho del viaje.
Beso grande a los dos.
Vamos no sean fiaca!!! Escriban que estamos esperando para retomar el viaje. Nos dejaron anclados en San Luis. Está bueno esto de seguirlos en esta hermosa travesía. Los quiero mucho. Ana
ResponderEliminarHola Flor y Pedro!! Me gustaron mucho sus fotitos y palabras, gracias por compartir con nosotros su recorrido y por transmitirnos esa hermosa y mágica energía que da el viajar y viajar... Espero que sigan con mucha alegría y amor este camino que eligieron transitar juntos, muchos besossssss!! Euge S.
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